El fosfato diamónico (DAP) es una fuente de nitrógeno inorgánico ampliamente utilizada en la fermentación del vino. Su función principal es alimentar a las levaduras durante la fermentación alcohólica, especialmente cuando los mostos presentan deficiencia de nitrógeno. Al proporcionar fosfato y amonio, el DAP estimula una fermentación más rápida, controlada y completa, evitando paradas fermentativas. También ayuda a minimizar la producción de compuestos indeseables, como el sulfuro de hidrógeno, contribuyendo a mejorar la calidad aromática y el perfil sensorial del vino.