El escurridor de botellas es una solución eficiente para secar y almacenar botellas después del enjuague. Permite que estas se sequen por goteo al colocarlas en sus clavijas. La base cuenta con un borde elevado que recoge el líquido, manteniendo las botellas limpias y listas para embotellar. Ideal para botellas de hasta 750 ml, es fácil de montar y desmontar, lo que facilita su almacenamiento.
Características principales: