Malta caramelo, elaborada en Alemania, aporta a la cerveza notas aromáticas y de sabor a malta intensas, junto con un color más oscuro. Este perfil sensorial se caracteriza por un caramelo fuerte y oscuro, con sutiles notas de almendra y nuez. Esta malta es fácil de procesar, lo que permite su uso en proporciones más altas en la receta de granos. Además, tiene un efecto positivo en la formación y estabilidad de la espuma en la cerveza final.